Hay quienes no pueden resistir y leen las últimas páginas de un libro antes de empezar; hay quienes reniegan del final incierto de una película; hay quienes jamás hacen su viaje de búsqueda personal por la ausencia de destino. Jorge Drexler dice “Amar la trama”. “Lo importante no es el destino final, sino lo que acontece durante el desarrollo del relato (real, vital o imaginario, tanto da).” Un rosarino dice “lo importante es el camino”.
“Por esa pasión por la trama, - por el espacio que queda entre el principio y el fin, el que hay que rellenar, en el que suceden cosas, por ese asumir riesgos” es que Drexler decidió poner el acento en ese pasaje, en el desarrollo, y grabar las canciones en directo, con todos los músicos tocando en vivo simultáneamente. Su idea era captar el calor, la frescura y la alegría del tocar en vivo, una instantánea del momento para cambiar las habituales, rutinarias y hasta a veces frías sesiones de grabación.
Cierto es que este artista posee los medios para producirlo, se necesita dinero para tanto equipamiento y músicos a disposición, pero cierto también es que hay otros que podrían hacerlo y no lo hacen. Para tal fin, dispuso a todos los músicos en círculo, mirándose entre sí, en un estudio decorado de manera acogedora: iluminación tenue, un sofá negro, sillas, almohadones, una alfombra y la participación de veinte espectadores (inscriptos en Myspace) en cada uno de los cuatro días de grabación. Otro elemento para romper esta vez con su propia tradición, es la ausencia de sonidos electrónicos. Este tipo de grabación simultánea es más exigente a la hora de cometer errores y en la concentración de todos y cada uno de los músicos.
“Por esa pasión por la trama, - por el espacio que queda entre el principio y el fin, el que hay que rellenar, en el que suceden cosas, por ese asumir riesgos” es que Drexler decidió poner el acento en ese pasaje, en el desarrollo, y grabar las canciones en directo, con todos los músicos tocando en vivo simultáneamente. Su idea era captar el calor, la frescura y la alegría del tocar en vivo, una instantánea del momento para cambiar las habituales, rutinarias y hasta a veces frías sesiones de grabación.
Cierto es que este artista posee los medios para producirlo, se necesita dinero para tanto equipamiento y músicos a disposición, pero cierto también es que hay otros que podrían hacerlo y no lo hacen. Para tal fin, dispuso a todos los músicos en círculo, mirándose entre sí, en un estudio decorado de manera acogedora: iluminación tenue, un sofá negro, sillas, almohadones, una alfombra y la participación de veinte espectadores (inscriptos en Myspace) en cada uno de los cuatro días de grabación. Otro elemento para romper esta vez con su propia tradición, es la ausencia de sonidos electrónicos. Este tipo de grabación simultánea es más exigente a la hora de cometer errores y en la concentración de todos y cada uno de los músicos.
El primer corte, “Una canción me trajo hasta aquí”, fue compuesta para Ana Belén y Victor Manuel, pero Drexler nunca la había grabado. Además de esta canción, se pudo saber que uno de los temas está dedicado a Luca, su pequeño hijo de 10 meses, y se llamará “Noctiluca”.
La presentación del disco se realizará en la sala sinfónica del Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria el día 14 de Abril (fuente. ABC.es). No hay información aún de los destinos de la gira, pero como es costumbre, debiera pasar por nuestra Buenos Aires. Esperemos que así sea, y que sea lo más pronto posible.
Un saludo a todos.
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